sábado, 12 de diciembre de 2009

El fantasma y yo


Mi alma es una princesa en su torre metida,con cinco ventanitas para mirar la vida. Es una triste diosa que el cuerpo aprisionó. Y tu alma, que desde antes de morirte volaba, es un ala magnífica, libre de toda traba...Tú no eres el fantasma: ¡el fantasma soy yo!¡Qué entiendo de las cosas! Las cosas se me ofrecen,no como son de suyo, sino como aparecen a los cinco sentidos con que Dios limitó mi sensorio grosero, mi percepción menguada. Tú lo sabes hoy todo..., ¡yo, en cambio, no sé nada! Tú no eres el fantasma: ¡el fantasma soy yo!